¿QUÉ ES EL CETA?
Es el acuerdo de comercio e inversiones entre Canadá y la Unión Europea, también conocido con las siglas en inglés CETA, y en español AECG.
Se trata de un acuerdo "mixto" celebrado tanto por las instituciones de la UE como por los Gobiernos de los Estados miembros.
El acuerdo sirve para la cooperación entre ambas partes y, con ello, establecer una política comercial y reducir las tasas aduaneras.
Además es un instrumento para impulsar el crecimiento que beneficie a las empresas y ciudadanos tanto europeos como canadienses.
La UE y Canadá firmaron el CETA el 30 de octubre de 2016 y entró provisionalmente en vigor el 21 de septiembre del año pasado. El Parlamento Europeo ya lo ha ratificado pero aún falta la ratificación de los Estados miembros de la UE, por lo que sólo han entrado en vigor las partes del acuerdo que son competencia exclusiva de la UE, las cuales no requieren de ratificación de los Estados miembros en virtud del art. 3 TFUE.
Las partes del tratado que NO han entrado en vigor son:
- Protección de las inversiones.
- Acceso al mercado de cartera.
- El sistema de Tribunal de inversiones.
¿CUÁLES SON LOS OBJETIVOS QUÉ PERSIGUE?
Los principales objetivos de este acuerdo internacional son:
- Facilitar los intercambios económicos;
- Eliminar las barreras al comercio;
- Fijar normas para el futuro.
Especialmente, este acuerdo regula el acceso de mercados a bienes y servicios, tarifas aduaneras, participación de empresas extranjeras en concursos públicos, reconocimiento de títulos profesionales y estándares de protección alimenticia, sanitaria y ambiental.
- Protección de las inversiones.
- Acceso al mercado de cartera.
- El sistema de Tribunal de inversiones.
¿CUÁLES SON LOS OBJETIVOS QUÉ PERSIGUE?
Los principales objetivos de este acuerdo internacional son:
- Facilitar los intercambios económicos;
- Eliminar las barreras al comercio;
- Fijar normas para el futuro.
Especialmente, este acuerdo regula el acceso de mercados a bienes y servicios, tarifas aduaneras, participación de empresas extranjeras en concursos públicos, reconocimiento de títulos profesionales y estándares de protección alimenticia, sanitaria y ambiental.
¿QUÉ VENTAJAS SUPONDRÁ ESTE ACUERDO?
1. Desaparición de aranceles (impuestos aduaneros) en el sector farmacéuticos, maquinaria, electrónica, textil, calzado y vehículos a motor. Antes del acuerdo se aplicaban al 99%. Elimina, además, las barreras de inversión e incluye el Sistema de Corte e Inversión (ICS)
2. Supone un ahorro de 590 millones de euros al año para Unión Europea.
3. Beneficiará tanto a las multinacionales como a las grandes empresas y las PYME.
3. Beneficiará tanto a las multinacionales como a las grandes empresas y las PYME.
4. Canadá ganará mayor y mejor acceso a un mercado de 500 millones de personas con ventajas para sus empresas.
5. Aumentará el comercio de bienes y servicios entre ambos territorios en casi un 25% y elevar la producción de la UE en 12.000 millones de euros al año.
6. Protege la democracia, los consumidores y el medio ambiente. Incluye las garantías necesarias para que los beneficios económicos no vayan en contra de la democracia, la salud y la seguridad del consumidor.
¿QUÉ INCONVENIENTES TIENE?
1. Se negoció con una gran opacidad y se criticó que beneficia a las multinacionales y no a los ciudadanos. Este acuerdo supone que los productos canadienses llegarán más baratos a la UE y esto perjudicará a los productores locales.
2. Han generado desconfianza los arbitrajes del ICS, ya que los inversores extranjeros podrán demandar a los Estados ante este tribunal especial sin pasar por sus tribunales ordinarios.
3. Además el ICS, al ser un sistema privado de administración de justicia entre inversores y Estados, supone un ataque a la democracia y al Estado de derecho porque rompe el principio de igualdad ante la ley.
4. Las normas canadienses y europeas respecto del tratamiento de la carne se contradicen, ya que en Canadá se permite hormonar o clorar la carne, sin embargo, estas prácticas en la UE están prohibidas.
EL CETA, EL CABALLO DE TROYA DEL TTIP
Muchos periódicos consideran que el CETA es como el famoso caballo de Troya del TTIP (Asociación Transatlántica para el comercio y la inversión). En breves palabras, es un tratado precedente y de la misma naturaleza que el CETA que fue negociado entre EEUU y UE.
Ambos tratados han sido duramente criticados ya que se estima que no beneficia a los ciudadanos porque son tratados de comercio devastadores para el empleo y la economía.
La principal diferencia entre estos tratados es que en el caso del CETA las empresas canadienses se ven más beneficiadas que las empresas estadounidenses en el caso del TTIP.
El CETA ha sido bautizado como el caballo de Troya del TTIP, puesto que este tratado inaugurará para Europa esta nueva generación de acuerdos comerciales. La aprobación del CETA, por otra parte, también implica una menor resistencia a la ratificación del otro acuerdo, en este caso con Estados Unidos y con una mayor intención de armonizar regulaciones.
¿UNA OPORTUNIDAD PARA LA EMPRESA ESPAÑOLA?
Si bien es verdad que en las noticias se muestran "las dos caras de la moneda" del CETA, el Gobierno de España únicamente se dedica a enseñarnos los beneficios de dicho acuerdo. Pero ¿realmente resulta tan beneficioso para nuestro país?
Para el Ministerio de economía, industria y competitividad sí. Sostiene que es un acuerdo de progreso ya que más allá de la eliminación de obstáculos al comercio, el CETA toma en consideración a las personas y al medio ambiente.
Se calcula que en España hay alrededor de 1,3 millones de puestos de trabajo que dependen de las exportaciones a países de fuera de la UE. En concreto, Canadá es uno de los grandes socios comerciales ya que en 2015 España exportó bienes y servicios por valor de unos 1.400 millones de euros y que importó por valor de unos 1.000 millones. Por tanto, la balanza comercial entre ambos países fue de unos 400 millones de euros.
Además, los sectores de la economía española que más se beneficiarán de este acuerdo y de la práctica de la desaparición de los aranceles son:
- Farmacéutico.
- Maquinaria y productos eléctricos.
- Textil y calzado.
- Vehículos de motor.
Pero en la otra cara de la moneda se encuentran los pequeños productores locales, ya que el comercio en alimentos y productos agrícolas y ganaderos se ha concentrado aún más en manos de grandes productores, dejando a los pequeños agricultores, ganaderos y consumidores desprotegidos. Además no se han generado empleos significativos y de calidad.
¿DE VERDAD NOS COMPENSA TENER MÁS VARIEDAD DE PRODUCTOS Y A MENOR PRECIO A COSTA DE TENER UNOS SUELDOS MÁS BAJOS?
¿QUÉ INCONVENIENTES TIENE?
1. Se negoció con una gran opacidad y se criticó que beneficia a las multinacionales y no a los ciudadanos. Este acuerdo supone que los productos canadienses llegarán más baratos a la UE y esto perjudicará a los productores locales.
2. Han generado desconfianza los arbitrajes del ICS, ya que los inversores extranjeros podrán demandar a los Estados ante este tribunal especial sin pasar por sus tribunales ordinarios.
3. Además el ICS, al ser un sistema privado de administración de justicia entre inversores y Estados, supone un ataque a la democracia y al Estado de derecho porque rompe el principio de igualdad ante la ley.
4. Las normas canadienses y europeas respecto del tratamiento de la carne se contradicen, ya que en Canadá se permite hormonar o clorar la carne, sin embargo, estas prácticas en la UE están prohibidas.
EL CETA, EL CABALLO DE TROYA DEL TTIP
Muchos periódicos consideran que el CETA es como el famoso caballo de Troya del TTIP (Asociación Transatlántica para el comercio y la inversión). En breves palabras, es un tratado precedente y de la misma naturaleza que el CETA que fue negociado entre EEUU y UE.Ambos tratados han sido duramente criticados ya que se estima que no beneficia a los ciudadanos porque son tratados de comercio devastadores para el empleo y la economía.
La principal diferencia entre estos tratados es que en el caso del CETA las empresas canadienses se ven más beneficiadas que las empresas estadounidenses en el caso del TTIP.
El CETA ha sido bautizado como el caballo de Troya del TTIP, puesto que este tratado inaugurará para Europa esta nueva generación de acuerdos comerciales. La aprobación del CETA, por otra parte, también implica una menor resistencia a la ratificación del otro acuerdo, en este caso con Estados Unidos y con una mayor intención de armonizar regulaciones.
Lo único seguro ahora mismo es que el destino del CETA está unido al destino del TTIP
¿UNA OPORTUNIDAD PARA LA EMPRESA ESPAÑOLA?
Si bien es verdad que en las noticias se muestran "las dos caras de la moneda" del CETA, el Gobierno de España únicamente se dedica a enseñarnos los beneficios de dicho acuerdo. Pero ¿realmente resulta tan beneficioso para nuestro país?
Para el Ministerio de economía, industria y competitividad sí. Sostiene que es un acuerdo de progreso ya que más allá de la eliminación de obstáculos al comercio, el CETA toma en consideración a las personas y al medio ambiente.Se calcula que en España hay alrededor de 1,3 millones de puestos de trabajo que dependen de las exportaciones a países de fuera de la UE. En concreto, Canadá es uno de los grandes socios comerciales ya que en 2015 España exportó bienes y servicios por valor de unos 1.400 millones de euros y que importó por valor de unos 1.000 millones. Por tanto, la balanza comercial entre ambos países fue de unos 400 millones de euros.
Además, los sectores de la economía española que más se beneficiarán de este acuerdo y de la práctica de la desaparición de los aranceles son:
- Farmacéutico.
- Maquinaria y productos eléctricos.
- Textil y calzado.
- Vehículos de motor.
Pero en la otra cara de la moneda se encuentran los pequeños productores locales, ya que el comercio en alimentos y productos agrícolas y ganaderos se ha concentrado aún más en manos de grandes productores, dejando a los pequeños agricultores, ganaderos y consumidores desprotegidos. Además no se han generado empleos significativos y de calidad.
…Y MIENTRAS EN ESPAÑA
No hay que pasar desapercibido
las diferentes posiciones que han tomado los partidos políticos de nuestro
país. El pleno del Congreso ratificó el CETA con votos a favor del PP,
Ciudadanos y PNV; la abstención del PSOE y el voto en contra del resto grupos.
También resulta curioso el cambio
de posición del PSOE que apoyó dicho acuerdo en el Parlamento Europeo y en la
Comisión de Exteriores, y ha llegado al Pleno con la abstención tras la
victoria que logró Pedro Sánchez como secretario general del partido. Esto
provocó que recibiera duras críticas por parte de PP y Ciudadanos. Rivera
sostuvo que “los que se oponen a este tratado es que no confían en nuestras empresas
y productos y temen que los consumidores tengan más oferta”.
Ante esta situación el PSOE quiso
justificarse alegando la necesidad de “revisar
los tratados” para buscar un comercio internacional más justo y garantizar los
derechos de los ciudadanos.
El no lo ha encabezado Podemos
que afeó al PSOE que se mantuviera en la abstención ya que el CETA amenaza los
derechos económicos, medioambientales y de los ciudadanos. Además, sin ir más
lejos, para Podemos el CETA es inconstitucional considerando que contraviene
los siguientes artículos de la Constitución Española:
-El principio de unidad jurisdiccional (art.
117.5).
-Derecho a la tutela efectiva de los jueces y
tribunales (art. 24.1).
- -Derecho al juez predeterminado por la ley (art.
24.2).
- -La gratuidad de la justicia (art. 119).
- -Arbitrariedad de los poderes públicos (art.
9.3).
-El derecho de la ciudadanía a participar en los
asuntos públicos, directamente o por medio de representantes electos.¿DE VERDAD NOS COMPENSA TENER MÁS VARIEDAD DE PRODUCTOS Y A MENOR PRECIO A COSTA DE TENER UNOS SUELDOS MÁS BAJOS?
